martes, 26 de abril de 2016

¡Hoy camino ocho paraderos!

A veces la falta de energía nos sobrepasa y debemos obedecer a nuestro cuerpo, a descansar que el dolor pasará, oh sí, pero otras veces ya un poco mejor hay que desobedecerlo sin chistar. Con una buena caminata podemos disminuir el estrés, bajar de peso, mejorar la circulación sanguínea y reducir un ataque cardíaco (un paciente de AR tiene más probabilidades de padecer uno). Ponerse pequeñas metas y cumplirlas nos motivará a superar limitaciones que la mente concibe antes de intentarlo siquiera. Yo empecé con un paradero. Motívate, ¡vale la pena!


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